Voy a hacer una pequeña gran crónica de un fin de semana intenso de carreras.
Después de un final de temporada tan decepcionante como el del año pasado donde una rotura absurda de un conector multiplex me dejo sin señal cuando tenía el nacional en el bolsillo, costo recuperarse pero se consiguió antes de lo que yo pensaba.
Y se acercaba la primera carrera después de un invierno en el que no había podido rodar prácticamente por diversas causas por lo que iba con algunas dudas a la primera carrera en Parla, actual circuito de casa de Cabezas y circuito donde muchos pilotos madrileños han podido entrenar y preparar la carrera.
Después de un viaje maratoniano de 8 horas (actualmente vivo en Blanes por trabajo), llegamos a Parla a las 12:30. Salimos a rodar y la pista estaba muy muy sucia con cero grip. A pesar de ello intentamos hacer dos depósitos para intentar aprenderme el circuito. En el segundo deposito pise el piano del la parabólica de entrada a recta haciendo un vuelo acabando con el tren trasero y la carrocería destrozados. Buena manera de empezar el nacional.
Comentar que Parla es un circuito muy difícil por lo peligroso de las chicanes, en las que despegar es muy fácil y cada vuelta que pasa es un peso de encima que te quitas. A mi este tipo de trazado en los que la mínima pasada se convierte en un destrozo no me acaban de gustar y no acabo de tirar como a mi me gustaría por desconfianza.
Volviendo a la carrera después de la rotura repare el coche y volvimos a salir. Poco a poco fuimos cogiéndole el aire al circuito y haciendo pequeños cambios en los que íbamos ganando decimas. También comparamos motores y conforme iba cogiendo confianza con la pista iba acercándome a los tiempos de los mejores.
El sábado por la mañana todo empezó bien, y después de algún cambio más acabe siendo el más rápido en la última serie de entrenos marcando un 20.0. de vuelta rápida.
En las clasificatorias la pista había cogido un poco mas de agarre y el coche ya no me dejaba hacer ciertas curvas como en los libres, y no me salían los mismos tiempos. Por otro lado Cabezas, Peracho y Víctor empezaron a rodar realmente rápido poniéndonos cuartos hasta la última serie.
Antes de la última serie decidí quitar convergencia trasera para ganar un poco más de velocidad, y funcionó muy bien. Hice una buena manga colocándome tercero a poco más de medio segundo de Peracho que era segundo. Se puede decir que era un buen resultado de cara al domingo.
El sabado por la tarde me di cuenta de que había estado trazando mal la curva de final de recta todo el fin de semana, y que posiblemente estaba perdiendo más de una decima en esa curva. Por lo que estaba confiado de que el domingo podría haber posibilidades de luchar la victoria.
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ResponderEliminararomatherapy